Tasca de hoy
En La Falda no podemos esconder nuestro gusto compulsivo por la cocina, una pasión alborotada, que es como a nosotros nos gusta llamarlo. Y es que a menudo nuestro espíritu Inquieto, díscolo y hasta revoltoso, convierten nuestra tasca de barra de latón y columnas férreas en un rincón de encanto diferente, encuentro de barrio y buenas costumbres.